Aunque el Camino de Santiago se remonta a la época de Jesús, ya con 2000 años de antigüedad, sigue de moda y cada vez más se posiciona como uno de los destinos turísticos más buscados a nivel mundial.
Las prioridades en turismo han cambiado, de viajes enfocados en compras, resorts, parques de diversiones a viajes de experiencias, historia y ¡contacto con la naturaleza!
Todo esto se reúne en el Camino de Santiago: deporte, cultura, gastronomía, naturaleza y un alto componente de espiritualidad!
Este último componente es el que hace de este destino un lugar mágico y una experiencia que cambia vidas. La espiritualidad que se vive en sus etapas, tiene origen desde su creador, el Apóstol Santiago quien fue un hombre de profunda espiritualidad y una gran fe. Este legado que se vive en cada kilómetro recorrido, se contagia a todos los peregrinos como visitantes de este lugar. Es así como al llegar a su fin, la Catedral de Santiago de Compostela, se tiene renovado el alma y el corazón hinchado de felicidad.
Para cumplir este reto como ciclista, debes recorrer un mínimo de 200 kilómetros para obtener la Compostela o diploma que otorga la iglesia por haber realizado esta peregrinación.
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No dejes de vivir esta experiencia, ¡el tiempo es ahora!